La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha detectado estos días durante su viaje a Londres cierta «desconfianza» de los inversores extranjeros en la «política fiscal del Gobierno» de Pedro Sánchez y en las «amenazas de topar los precios».
«Un gobierno que se comporta como si fuera Robin Hood para los pobres, como hablan ellos, lo único que hace es expulsar a la empresa y expulsar empleos», ha justificado Ayuso.
«Y nosotros lo que estamos dejando claro en estos días es que no todos somos iguales en España, que nosotros somos respetuosos con las personas que ponen el patrimonio de sus hijos en juego para crear economía y que somos un gobierno que, por supuesto, no fomentamos un capitalismo salvaje», ha agregado.
En este punto, la jefa del Ejecutivo autonómico ha asegurado que defiende «la creación de empleo, que haya una burocracia justa, que no sea confiscatoria, que haya unos impuestos justos».
Reglas del juego
Por ello, ha abogado por que haya «unas reglas del juego que permita que venga la empresa, que se cree estabilidad y, sobre todo, que eso se traduzca en futuro, en oportunidades, que es algo que el Gobierno les está negando a tantos españoles sin saberlo bajo esos mantras ideológicos». «Madrid es otra cosa», ha zanjado.
Ayuso ha manifestado que «es cierto que Madrid se percibe como un lugar diferente y es más, muchos inversores -ha agregado- nos dicen que a pesar del Gobierno de Sánchez, sí que van a invertir en Madrid, pero desconfían de la política fiscal, del Gobierno, de cómo se señala a los supermercados». «Ayer -ha añadido- lo hicieron contra El Corte Inglés, otras veces lo hacen a capricho contra otras empresas. Es algo insensato que da muy mala imagen».
