ULEG cuestiona el elevado coste del proyecto, que tendrá el plazo de ejecución de un año
LEGANÉS/ 11 NOVIEMBRE 2020 / El presidente del consorcio urbanístico ‘Leganés Tecnológico’ (Legatec), Mariano González, y el representante de la empresa constructora adjudicataria, ‘Abaldo SA’, Teodoro Jesús Abad, han firmado el contrato para llevar a cabo el proyecto de remodelación de los accesos al polígono empresarial ‘Legatec’ desde la M-425, que ascenderá a 8,7 millones de euros al incluir una macro-rotonda y un túnel subterráneo.
Según el contrato rubricado, que ha hecho público el partido independiente Unión por Leganés (ULEG), el “precio” asciende a 7,2 millones de euros, más 1,5 millones en concepto de IVA.
El contrato establece un periodo de construcción de un año, con la posibilidad de que el Consorcio -formado por Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Leganés- resuelva el contrato o imponga las “penalidades previstas” en caso de incumplimiento.
El portavoz de ULEG, Carlos Delgado, ha asegurado que a este montante “seguramente habrá que sumar más dinero dada la naturaleza de este tipo de obras donde siempre surgen modificados y ‘problemas’ de última hora que encarecen aún más una infraestructura de escasa utilidad práctica y bajo impacto vecinal”.
Delgado, que ha recordado que este proyecto ha generado “un aluvión de quejas por parte de toda la sociedad leganense” debido al momento actual de crisis por la pandemia, ha declarado que “es una locura gastarse este dinero con la que está cayendo”.
Mejora de las comunicaciones
Por su lado, desde el Ayuntamiento han defendido este proyecto, ya que, según han reiterado, mejorará las comunicaciones y accesos en este enclave leganense, con lo que se incentivará la instalación de nuevas empresas. Además, han recordado que este dinero ya está consignado precisamente de la venta de suelo de las fases del polígono, iniciativa que contó con el respaldo de sindicatos y la patronal.
Entretanto, los independientes han manifestado que “los recursos de ese consorcio son públicos y provienen precisamente de las plusvalías generadas por el suelo propiedad de los vecinos (a los que se expropió y no se les ha dado aún ni dinero ni terrenos) y del propio ayuntamiento de Leganés”.
