Los responsables de la parroquia de San Salvador, en Leganés, han anunciado la reapertura gradual del templo, tras las obras de rehabilitación estructural llevadas a cabo por unas grietas y afecciones que ponían en riesgo la integridad del inmueble religioso.
Las obras, que comenzaron hace casi tres años, llegan a su fin, con lo cual se inicia ahora un proceso de «apertura gradual», según sus responsables.
De esta manera, según han informado, el próximo 16 de junio, con motivo de la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, tendrá lugar la ‘Inauguración Pastoral‘ de la iglesia, con una procesión desde la parroquia de Nuestra Señora de Butarque hasta la iglesia de San Salvador, donde a continuación se celebrará la Eucaristía.

Pese a la apertura, los retablos del templo, de José Churriguera, «continuarán limpiándose». Está previsto que el próximo día 15 de agosto, solemnidad de la Asunción de la Virgen y de Nuestra Señora de Butarque, Patrona de Leganés, el obispo auxiliar de la Diócesis de Getafe, José María Avendaño, presida a las 11:00 horas la Eucaristía tradicional «en la que ya toda la iglesia parroquial y sus retablos, estarán completamente a la vista y que constituirá la “Inauguración Devocional” de la iglesia.
Posteriormente, el 15 de septiembre, a las 20:00 horas y coincidiendo con la fiesta de Nuestra Señora de los Dolores y de la Soledad, se celebrará una Misa de Acción de Gracias por la terminación de las obras.
Finalmente, el 17 de septiembre, a las 10.30 horas, el Obispo, Ginés García Beltrán, celebrará la Santa Misa de la solemne “Inauguración Institucional” de la parroquia con presencia de las máximas autoridades regionales, y retransmitida en directo por la 2 de RTVE.
Las obras
Los arquitectos de la restauración, Pedro Jaén y Bernardo Valdés, detallaron en 2021 la intervención en el edificio -que data del Siglo XVII- «debido a los procesos patológicos graves, derivados de problemas estructurales y también en la cubierta que se detectaron hace cinco años».

La ejecución de la obra se planteó por fases dando prioridad en principio a la consolidación del terreno del entorno de la torre, que tenía problemas de cimentación, a través de la inyección de resinas en el suelo para evitar el movimiento diferencial de la torre que causaba problemas en los muros y en el pórtico.
En una segunda fase se dio estabilidad a los muros de la nave central, cuyo movimiento había provocado una quiebra de la bóveda de esa nave. También informaron de que actualmente se encuentran trabajando en la última parte de la cubierta, y el resto de las obras consistirán en terminar el proyecto: renovar la estructura y las instalaciones -eléctrica y climatización- y algunos detalles del interior donde hay que reparar daños como fisuras, grietas y acabados.