El aulario de Primaria contará con diez aulas, otras seis de desdoble, zona administrativa y aula de profesores y se construirá en 6 meses
LEGANÉS / 7 DICIEMBRE 2016 / El consejero de Educación, Juventud y Deportes de la Comunidad de Madrid, Rafael van Grieken, ha negado en la Asamblea de Madrid que se hayan registrado situaciones de riesgo para los alumnos del colegio ‘Constitución de 1812’ de Leganés mientras han durado las obras de ampliación del centro.
Según denunció en su día la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), la maquinaria pesada en el centro para la construcción del nuevo aulario y el gimnasio pudo suponer riesgo para los escolares.
“Nunca ha habido un problema de seguridad, aunque es comprensible que los padres quieran ver terminadas las obras”. Ha sido la respuesta del consejero a una pregunta realizada en el último Pleno de la Asamblea por el diputado socialista y exalcalde leganense Rafael Gómez Montoya sobre los plazos de terminación de la ampliación del centro.
Sobre estos plazos, Van Grieken ha sido preciso: “La prevision es que el colegio esté concluido completamente para el próximo curso, como ha sido informada la comunidad ecudativa”.
Nuevo aulario
En este punto, el consejero se detuvo sobre las nuevas dotaciones que tendrá el colegio leganense. Así, detalló que ya están terminadas las tres aulas de Infantil y que la terminación del gimnasio se ha prorrogado hasta el 22 de diciembre.
Van Grieken ha adelantado que la cuarta fase de obras, que se encargó en octubre, incluirá diez aulas de Primaria, otras seis de desdoble, zona administrativa y aula de profesores. La ejecución -según adelantó- no requerirá más de seis meses.
Por su lado, Gómez Montoya cuestionó los contras de la construcción de colegios por fases, que aplicó al ‘Constitución de 1812’, donde según subrayó, los “alumnos llevan cinco años conviviendo con obras”.
Las consecuencias pasan por estudiar “con la maquinaria pesada funcionando”, con persianas cerradas y sin los espacios que “la ley les garantiza”.
El consejero aseguró que la construcción por fases es una manera “de optimizar recursos económicos, materiales y humanos”, más aún en época de crisis.
“La planificación se adecua a las necesidades de escolarización, porque no sería coherente tener un centro con aulas vacías durante años. Construir un colegio por fases es un mal menor”, explicó.
