Los madrileños que tengan al cuidado en su casa a padres o abuelos mayores de 65 años, dependientes o con una discapacidad podrán deducirse hasta 500 euros a partir de 2023. Se trata de una de las novedades fiscales que ha anunciado el consejero de Economía y Hacienda, Javier Fernández-Lasquetty, en el marco del proyecto de Ley con deducciones fiscales que supondrán un ahorro de 91,9 millones de euros para casi 700.000 contribuyentes madrileños a través del IRPF.
Otra de las novedades en estas deducciones será la del 10% para los gastos relacionados con el alquiler de la casa arrendada como, por ejemplo, los de conservación, seguros o reparaciones.
El ahorro fiscal también abarca al ámbito de los estudios superiores. Así, aquellas personas que quieran cursar un Grado, máster o doctorado, y tengan que pedir un préstamo para esta finalidad, podrán desgravarse el 100% de los intereses.
Además, se van a ampliar otras deducciones ya existentes, como la relacionada con los gastos de enseñanza de idiomas, cuyo porcentaje de rebaja sube del 10% al 15%, o con la contratación de personas que se encarguen del cuidado a mayores en situación de dependencia o discapacidad, extendiendo la vigente para la misma atención a menores de 3 años. En este caso, se podrán deducir el 25% de los gastos de cotización a la Seguridad Social.
También se ampliará al 40% la deducción vinculada a la adquisición de acciones y participaciones sociales de nuevas entidades o de reciente creación, con un límite de 9.000 euros.

En Consejo de Gobierno
El texto validado este martes por el Consejo de Gobierno incluye tres deducciones que se estrenan relacionadas con el cuidado de personas mayores en el entorno familiar, el arrendamiento de viviendas y los estudios superiores, así como la ampliación del porcentaje de deducción de otras tres ya en vigor.
«Son ya seis las leyes de bajada de impuestos que se han aprobado en el mandato de Isabel Díaz Ayuso», ha puesto en valor el consejero madrileño. La iniciativa será remitida mañana a la Asamblea para iniciar su tramitación parlamentaria y su aplicación prevista a partir de este próximo año, «ayudando así a las familias madrileñas ante el incremento de los precios, el coste de la energía y la situación de alta inflación».
Esta batería de deducciones fiscales se une a otras bajadas de impuestos del Gobierno regional en esta legislatura, como la ampliación de la bonificación a los impuestos de Sucesiones y Donaciones entre hermanos y entre tíos y sobrinos, la deflactación en el tramo autonómico del IRPF o los incentivos en materia tributaria para fomentar la natalidad.