La Comunidad de Madrid estrena este mes la aceleradora de inversiones, una nueva herramienta para facilitar la llegada de grandes proyectos empresariales a la región y agilizar el inicio de sus actividades, esquivando el «calvario» que supone a veces la burocracia y el «papeleo», según ha manifestado el consejero de Hacienda, Javier Fernández-Lassquetty.
El Consejo de Gobierno ha aprobado este miércoles el decreto que regula esta unidad, que, según el consejero, «no es una estructura» por lo que no supondrá coste alguno para las arcas públicas, y que tiene como función coordinar la acción de la Administración autonómica para «agilizar la tramitación de todas las propuestas de alto impacto por su creación de riqueza y empleo». Estará integrada por las diferencias consejerías y los Ayuntamientos con competencias en la materia.
«Queremos que se agilice la tramitación y que Madrid genere más inversiones. Es un marco para animar a invertir y a competir, como hemos hecho en los últimos 20 años», ha señalado.
A este proceso podrán sumarse no solo los grandes proyectos, sino aquellas inversiones que supongan la generación de más de 50 puestos de trabajo con contrato indefinido o cuya inversión no inmobiliaria supere los 10 millones de euros.
En vigor este mes
El decreto con la creación de la aceleradora de inversiones de la Comunidad de Madrid se publicará en los próximos días en el Boletín Oficial regional (BOCM) para su entrada en vigor este mismo mes.
La aceleradora de inversiones, organismo público dependiente de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo, también tendrá en cuenta otros aspectos de los solicitantes como la apuesta en I+D+i, la calidad de los puestos de trabajo o el impacto en la cadena de valor.
Las solicitudes de esta nueva herramienta serán atendidas en menos de 30 días, y, en caso de ser calificadas favorablemente, su tramitación irá por el procedimiento de urgencia, lo que permitirá reducir los plazos al máximo legal posible. Dichas solicitudes podrán también presentarse en inglés para su tramitación, lo que ayudará también a aminorar los plazos correspondientes.
El nuevo organismo público de la Comunidad de Madrid también realizará el seguimiento del estado de tramitación de dichos proyectos ante los órganos competentes de las administraciones públicas, facilitando siempre la coordinación entre las implicadas.