Raúl Ariza recoge el Premio de Novela ‘Ciudad de Getafe’ por “Por mi gran culpa”
GETAFE/ 21 DE OCTUBRE DE 2020/ La filósofa valenciana Adela Cortina (1947) ha reivindicado esta mañana en Getafe el valor “fundamental” de la palabra para la política, para “deliberar sobre lo bueno y sobre lo malo”.
“Sería bueno que la deliberación se instalara en la comunidad política, que se use la palabra para deliberar conjuntamente”, porque “la violencia es pre política”, ha dicho citando a la filósofa alemana Hannah Arendt durante el transcurso de la entrega del Premio José Luis Sampedro, que otorga cada año el Festival de Novela Policíaca Getafe Negro.
Con este galardón, el jurado del premio ha reconocido “su labor de divulgación humanística, acercando el pensamiento a un amplio público, su compromiso social y su cercanía personal”.
Lorenzo Silva, el comisario de Getafe Negro, ha destacado “la solidez, la enorme pertinencia y la asequibilidad” del corpus de su pensamiento, destacando que ha hecho un “trabajo valioso en lo que tiene que ver con lo que denominamos fobia, que al final habla de la perdida de consideración de la cualidad humana del otro”.
En ese sentido, Silva ha valorado su obra “Aporofobia, el rechazo al pobre”.
Contra ese rechazo, para “acabar con la pobreza”, Cortina ha reivindicado “la buena economía” que crea “riqueza para todos”, ya que “la situación sanitaria no es buena, pero la situación social tampoco es buena”.
La autora de textos como “Ética mínima”, “Ética sin moral” o “Por una ética sin consumo” ha reivindicado también que la filosofía y la ética entren en los planes de estudio y de Secundaria y Bachillerato.
Ariza, Premio Ciudad de Getafe
Por otro lado, el escritor castellonense Raúl Ariza Pallarés ha recogido el XXIV Premio de Novela ‘Ciudad de Getafe’ por su novela “Por mi gran culpa”, en la que es Dios el que ejerce de narrador, en el que se hacen evidentes el enfrentamiento entre el bien y el mal y que “consolida la trayectoria” de Ariza como novelista, ha dicho Lorenzo Silva.
Ariza, que no se considera escritor de novela negra, ha reconocido que terminó de reescribir la novela durante los meses del confinamiento, de ahí la carga de “tristeza y desesperación” que tiñen el texto de “Por mi gran culpa”.
“La literatura me ha salvado, si no del desastre, sí de la locura”, ha dicho Ariza.
La alcaldesa Sara Hernández ha defendido la cultura como “herramienta para salir de esta crisis” y ha avanzado “la obligación moral y política de luchar por el gran final” de la pandemia desde la sanidad pública y desde la investigación.