El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, ha vuelto a reclamar este lunes al Gobierno de la Nación que elimine la tasa de reposición para dejarles contratar 1.000 policías municipales más para poner en la calle «con carácter inmediato» y garantizar la seguridad.
Lo ha trasladado a los periodistas esta mañana una visita a un parque de Usera, uno de los distritos donde más han aumentado las reyertas protagonizadas por armas blancas en verano, junto a Villaverde y Carabanchel.
«Se trata de una circunstancia de seguridad ciudadana y la seguridad ciudadana corresponde tanto a Policía Nacional como a la Delegación del Gobierno y, por tanto, desde el Ayuntamiento de Madrid volvemos a hacer un llamamiento al Gobierno de la nación para que nos permita dotarnos de los 2.000 policías adicionales», ha indicado Carabante.
Concretamente, cree necesario contratar en primer lugar a unos 1.000 para contribuir a mejorar las condiciones de seguridad ciudadana, así como para el cumplimiento de las normativas y las leyes en la capital. «Lamentablemente el Gobierno de la nación no permite que el Ayuntamiento de Madrid pueda contratar a esos 1.000 nuevos policías», ha censurado.

Repunte de reyertas
Mientras, la vicealcaldesa de Madrid, Inmaculada Sanz, ha afirmado este lunes que para el Ayuntamiento «no es aceptable» el uso de armas blancas y la persistencia de reyertas protagonizadas por miembros de bandas juveniles violentas en la capital, por lo que pide ayuda al Gobierno de España ayuda para «erradicarlas por completo».
«Es verdad que se han producido detenciones, es verdad que ha habido operaciones importantes en los últimos meses, pero desde luego para nosotros no es aceptable que se siga las situaciones de utilización de armas blancas en zonas de nuestra ciudad y por lo tanto lo que queremos es erradicarlo de manera completa», ha indicado esta mañana en una entrevista en ‘EsRadio’, recogida por Europa Press.
Sanz ha indicado que ha habido un repunte de reyertas y riñas tumultuarias este verano en Madrid, en la que las armas blancas han sido protagonistas. «Evidentemente estamos preocupados porque aunque Madrid es una de las ciudades más seguras del mundo en cuanto a las grandes capitales, tenemos problemas sobre todo con este tema de las bandas juveniles y sobre todo en algunos barrios concretos de la ciudad», ha apuntado.