Con su victoria, el Móstoles se sitúa rondando los puestos de privilegio y se acerca a la lucha por el ascenso
MÓSTOLES/ 24 FEBRERO 2020/ Segundo triunfo consecutivo del CD Móstoles URJC, esta vez en un escenario complicado, como es La Canaleja, ante uno de los rivales que están luchando por todo en este grupo séptimo de Tercera División, el Trival Valderas.
Con su victoria, el Móstoles se sitúa rondando los puestos de privilegio y se acerca a la lucha por el ascenso con una inyección de moral que ahuyenta los fantasmas de la falta de confianza que rondaba a los azulones.
El partido comenzaba con igualada y tanteo por parte de ambos bandos. De nuevo, un mal ajuste defensivo en esos minutos en los que ninguna escuadra destacaba era aprovechado por el rival para ponerse por delante. No se cumplía el minuto diez cuando un centro desde la izquierda habilitaba a Santi con espacios en el área y, con tiempo, se colocaba el balón para ponerlo en la red y firmar el 1-0.
Con la ventaja el Trival cedió el peso del partido al Móstoles, como ya hubiesen hecho otros rivales semanas atrás. El Móstoles en los primeros minutos le costó llegar, pero con el paso de los minutos se fue encontrando más cómodo y empezó a generar, tímidamente al inicio y con más vehemencia según pasaban los minutos.
Los avisos de la primera parte, se confirmaron en la segunda. Un Móstoles mucho más incisivo trató desde el inicio del segundo acto de igualar la contienda. Encontró premio pronto.
Portilla avisaba con una falta que obligaba a Alberto a intervenir con brillantez para despejar a córner, cuando ya se cantaba gol. En la siguiente, de nuevo a balón parado, Cortázar igualaba la contienda al aprovechar un jaleo en el área tras un balón colgado con la varita de Portilla.
Con el empate el partido ganó en emoción. Ambos optaban al triunfo y presentaban su candidatura a los tres puntos. El Móstoles pujó más por ellos y los azulones la siguieron y por fin, la consiguieron. En el 80’, Chupe ponía un balón desde la esquina y Kupen emergía entre las marcas, para poner en valor al Móstoles con un colosal cabezazo que suponía el 1-2.
Con el marcador favorable, los de casa intentaron la igualada, pero no tuvo ninguna acción de peligro real. El Móstoles administró bien la ventaja y supo estar concentrado para no sufrir para adjudicarse los tres puntos, con remontada incluida en una plaza complicada y devolviendo la estocada que el Trival ejecutó en El Soto en la primera vuelta.
Golpe de moral para los pupilos de Víctor González que vuelven a estar de nuevo en la pomada, ya que se comprime el grupo de cabeza. Los azulones asoman de nuevo por los puestos de privilegio y piensan en la visita del Parla, conjunto en horas bajas, que visitará el feudo mostoleño en siete días.