El jugador ve cumplido su deseo de pertenecer al conjunto pamplonica tras pasar dos exitosas etapas en calidad de cedido
GETAFE / 12 AGOSTO 2019 / El Getafe sigue cumpliendo pasos en la configuración del equipo dentro del mercado veraniego. La prioridad actual –explicada por el director deportivo de la entidad, Ángel Martín– exigía adelgazar la plantilla por excesivo número de efectivos. En el día de hoy la cifra ha bajado, gracias a la venta de Rober Ibáñez al Osasuna.
Con la firma del jugador con los pamplonicas, se pone fin a la corta participación del jugador, que en su año y medio en propiedad, apenas estuvo presente en media campaña dentro de la disciplina getafense.
Ibáñez regresa al lugar donde ha encontrado su mejor tono como futbolista. Tras numerosos cambios de equipo y diversas circunstancias en contra a lo largo de su carrera, el atacante había conseguido con el conjunto rojillo mostrar lo mejor de sí asentándose en la titularidad como extremo derecho.
Tuvo pocas oportunidades como azulón
El jugador criado en la cantera del Valencia recaló en el Getafe a mitad de la temporada 17/18 con poco rodaje tras haber salido hace pocos meses de una grave lesión de rodilla. El club, al considerar que no estaba preparado para el nivel de la primera división, lo entregaría cedido inmediatamente al equipo navarro para dar oportunidad al jugador de recuperar sensaciones compitiendo en segunda división.
Tras la buena imagen exhibida en su eventual salida, el Getafe quiso mantener a Ibáñez en plantilla para la temporada siguiente. Sin embargo, su aportación con los getafenses no fue la misma y la competencia por un sitio en la banda derecha le dejaba frecuentemente relegado al banquillo. Por este motivo, en el ecuador de la temporada se dio al futbolista la posibilidad de volver a Osasuna con una opción de compra, al considerar que el futbolista no encajaba en los planes de Bordalás.
La operación de compra se complicó
Con todas las partes de acuerdo -el jugador queriendo jugar en Osasuna, el Getafe vender y Osasuna comprar-, el traspaso se enfrió por la cifra de traspaso. La opción de compra estaba fijada en 3’6 millones de euros, cantidad que al conjunto rojillo le parecía excesiva. En el tira y afloja de números, la negociación se estancó y Osasuna llegó a tantear otra opción dentro del Getafe, la de conseguir cedido a Lazo, futbolista de la misma posición.
Finalmente, Osasuna vio cumplidas sus pretensiones. El fichaje ha sido fijado en 2 millones de euros, guardándose el Getafe el derecho a un 50% del importe en una potencial venta del jugador. El futbolista viajó hoy para firmar como jugador ya en propiedad de Osasuna, de lo que ha informado esta tarde la comunicación del Getafe para confirmar oficialmente la salida.