Radares fijos y móviles controlarán la velocidad de los vehículos por el casco urbano de Parla
El Ayuntamiento asegura que estos radares en el casco urbano de Parla no tienen “fin recaudatorio”, sino que pretenden “evitar accidentes de tráfico”
PARLA/ 14 JULIO 2014/ El Ayuntamiento de Parla instalará un sistema de control de velocidad de los vehículos que circulan por el casco urbano de la ciudad. En principio, este sistema contará con tres radares fijos y uno móvil, los cuales estarán ubicados en las grandes avenidas de la ciudad, según fuentes municipales.
Desde el Gobierno local aseguran que esta medida “no tiene un fin recaudatorio” por ello, explican, “el Ayuntamiento publicará en su Web la ubicación de estos radares, tanto de los fijos como los móviles”. Actualmente funciona ya el radar móvil que, según informa hoy la Web institucional se ubicará del 14 al 20 de julio, ambos inclusive, “de forma aleatoria” en las calles Toledo, Viario de Ronda, República Dominicana y Avenida Cerro del Rubal, y que los dispositivos fijos comenzarán a funcionar “en poco más de un mes”.
El objetivo de esta iniciativa es “evitar accidentes y atropellos dentro de la ciudad”, ya que, argumentan, la Policía Local de Parla ha constatado que “un gran número de vehículos sobrepasan los límites de velocidad establecidos”. Según las cifras ofrecidas, en el último año Parla ha registrado un incremento del 14,4% en el número de accidentes de tráfico; en 2013 se produjeron en Parla 848 accidentes, lo que supone un incremento de 77 siniestros con respecto a 2012, cuando hubo 771.
Durante la pasada semana, la Policía Local de Parla hizo una campaña informativa al respecto, en la que controlaron con radares la velocidad a la que, cerca de 900 vehículos, circulaban por diversas avenidas de la ciudad. El radar, ubicado de forma aleatoria en las calles de Toledo, Cerro Rubal, Avda. de América o Juan Carlos I, algunas de las grandes avenidas en las que, según destacan los agentes, “numerosos vehículos superan con creces los límites de velocidad permitidos”.
Corresponsal/ Arantxa Naranjo