Un abogado de Madrid ha presentado ante la Fiscalía Provincial una denuncia para que se investiguen posibles irregularidades en la gestión del Hospital de Torrejón, operado por la concesionaria Ribera Salud, así como una posible falta de supervisión por parte de la Comunidad de Madrid.
La denuncia plasma las grabaciones internas en las que «un alto directivo del grupo habría impartido instrucciones destinadas a reducir actividad asistencial, incrementar listas de espera y supeditar decisiones clínicas a criterios económicos«. En estos audios, un directivo señala a los responsables del centro que deben rechazar a pacientes «no rentables» y aumentar las listas de espera.

La denuncia destaca que «estas instrucciones podrían haber afectado especialmente a personas mayores de 65 años, población con mayor prevalencia de patologías crónicas y con mayor probabilidad de sufrir consecuencias graves por retrasos en diagnósticos y tratamientos».
Cese de directivas que habrían comunicado irregularidades
El escrito solicita la apertura de diligencias, la toma de declaración a los denunciados y que se requiera a la Comunidad de Madrid la entrega de los expedientes de supervisión, inspección y control contractual del hospital concesionado en los periodos objeto de revisión.
De confirmarse los hechos, el abogado denunciante, Javier Flores, considera que podrían constituir «prácticas que podrían constituir indicios de delitos de prevaricación administrativa, delitos contra la salud pública, lesiones imprudentes, coacciones y represalias contra alertadores internos«.

El documento menciona además el cese de cuatro directivas del hospital que habían comunicado estas posibles irregularidades a través del canal ético interno, así como la falta de «una reacción inmediata de la Administración sanitaria, pese a ostentar la obligación legal de supervisar la correcta prestación de un servicio público esencial».
Ribera Salud afirma que el audio de su CEO está «fuera de contexto»
Por su parte, Ribera Salud ha asegurado este jueves que el audio filtrado de su CEO, Pablo Gallart, en el que da instrucciones para rechazar pacientes o descartar prácticas no rentables, está «fuera de contexto» y que en ninguno de sus centros se han dado este tipo de actuaciones, manteniendo a los pacientes como su prioridad.
«Las informaciones recientemente publicadas sobre unos extractos de una grabación de una reunión interna en el Hospital de Torrejón no reflejan el contenido íntegro de la reunión y se encuentran fuera de contexto. Aun así, en un ejercicio de responsabilidad empresarial, el CEO Pablo Gallart ha solicitado voluntariamente desvincularse de la gestión del Hospital de Torrejón mientras el grupo lleva a cabo una auditoría», ha señalado la empresa en un comunicado.
Ribera Salud insiste en que la ética de sus profesionales es «incuestionable» y que su actuación diaria se basa en el cuidado de la salud de los pacientes.
La compañía también ha remarcado que esta situación «de ninguna manera» puede cuestionar el trabajo de sus más de 9.000 profesionales y un centenar de centros, y ha reiterado que en ninguno de ellos «se han producido prácticas contrarias al interés general de los ciudadanos».
Repercusiones políticas del escándalo
El espectro político madrileño se ha visto sacudido por esta polémica a lo largo de estos dos días. Numerosas han sido las voces que han criticado la gestión de los ‘populares’ en el ámbito sanitario a raíz de esta noticia, reclamando investigaciones y avanzando posibles acciones legales.
Entre otras voces, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha responsabilizado al PP de «hacer de la salud un negocio» y de utilizar la enfermedad de las personas como una «oportunidad para enriquecerse». Los socialistas han reclamado al Gobierno madrileño que cancele el contrato con Ribera Salud, la empresa concesionaria.
A estas críticas se ha unido también esta mañana Mónica García, ministra de Sanidad, que ha acusado al Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso de «corrupción institucional» al entender que una situación como la que se estaba comentando en el Hospital de Torrejón no podría darse «sin la connivencia de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid».

Hoy se ha sumado a estas peticiones de investigación el líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, que ha exigido este jueves que se lleve a cabo una auditoría «con absoluto rigor» en el Hospital de Torrejón de Ardoz porque este tipo de conductas «son contrarias a los principios básicos que debe de regir la Sanidad».
Así, Feijóo ha reclamado una auditoría a este centro hospitalario para «ver el rendimiento quirúrgico, el rendimiento de consultas externas, el rendimiento de pruebas, el rendimiento de sus servicios centrales, la lista de espera y analizar con rigor cómo se ha gestionado ese hospital en los últimos meses o años» en los que Gallart ha estado al frente del mismo.
«Estoy convencido que los compañeros de la Comunidad de Madrid lo están haciendo con absoluto rigor», ha defendido, eso sí, el presidente del PP nacional, que ha subrayado que este tipo de prácticas son «incompatibles» con la gestión de un hospital.
El líder del PP ha terminado por apuntar que «si hay alguien que pretende ahorrarse dinero a base de no atender a los pacientes, no solamente hay una responsabilidad administrativa, sino que hay que ver si hay una responsabilidad de otro tipo» y, en consecuencia, debería «ser denunciado y ser sancionado».
