La alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse (PSOE), ha enviado una carta al consejero de Transportes e Infraestructuras, David Pérez, instándole a «cooperar» ante los «graves socavones y grietas» detectados hace unas semanas en el trazado de las obras del proyecto fallido del tren a Navalcarnero.
En su misiva, la regidora socialista le insiste en la necesidad de «prevenir o evitar situaciones de riesgo que puedan derivarse» de las obras del citado proyecto, por lo que le traslada «la necesidad de realizar, de modo inaplazable, una visita de inspección conjunta entre los técnicos del Ayuntamiento y los de la Consejería».
Esta carta llega después de que el consejero de Transportes e Infraestructuras negara ya hace días que hubiera «riesgo para la seguridad» en los citados socavones y después de que acusara a la alcaldesa socialista de generar una «alerta artificial» por este asunto, que fue denunciado el 3 de febrero pasado.
«Es un intento de crear alarma y es curioso que sea a tres meses de las elecciones. Hay que hablar con seriedad. No tiene ningún alcance más que el que se quiera crear», respondía días después el consejero de Transportes, asegurando que los técnicos «ya han revisado» la situación de los terrenos.
Sin embargo, desde el Consistorio han vuelto a exigir al consejero de Transportes que les proporcione «toda la información referente a las obras ejecutadas y a su soterramiento y cuáles son las labores de mantenimiento que están llevando a cabo para garantizar la seguridad de las mostoleñas y mostoleños».
«Esto no es una cuestión de oportunismo político, es algo real y tangible. Las grietas y los socavones están ahí. Las obras llevan diez años paradas, pero estos desprendimientos de tierras se han producido en las últimas semanas y esto es preocupante», ha añadido la alcaldesa en la carta.
Informe municipal
En la misma, Posse ha adjuntado además el informe elaborado por los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo, en el que dejan constancia de que el Ayuntamiento de Móstoles no dispone de documentación de la Comunidad de Madrid relativa al estado de la infraestructura soterrada.
Tampoco cuentan con información sobre los puntos de acceso a la misma en caso de incidencias o emergencia o de si se están llevando a cabo labores de auscultación, inspección y mantenimiento de la infraestructura que discurre por el subsuelo de la zona urbana consolidada de Móstoles.
«La falta de datos precisos sobre los planos realmente ejecutados de las obras existentes en el subsuelo hace imposible, además, calcular las posibles interferencias que puedan ocasionar nuevas canalizaciones/actuaciones que se desarrollen en esta zona de la ciudad», ha añadido Posse, reiterando su petición de documentación.
Por último, la primera edil ha pedido también al consejero que «lleven a cabo las labores de vigilancia y protección de las infraestructuras que les competen», dado que «es responsabilidad de la Consejería velar por la seguridad de todas las instalaciones subterráneas o en superficie, operativas o no».
Desde la Consejería de Transportes e Infraestructuras han reiterado que los técnicos de la Comunidad de Madrid que visitaron ese mismo 3 de febrero los terrenos «han visto que no hay ningún riesgo ni para los vecinos ni para el municipio», pero que estos van a ser «rellenados».