“El Belén Gigante de Playmobil ha sido sin duda uno de los mayores reclamos de estas Navidades y hemos recibido numerosas muestras de agradecimiento”. Así ha querido zanjar la concejal de Economía, Industria y Empleo, Ángeles García, las críticas de la oposición acerca de su “elevado coste”.
Lo ha hecho en el último Pleno municipal después de que PSOE y Podemos volvieran a cuestionar el “exagerado” gasto que el Ayuntamiento había hecho en esta instalación navideña, situada estas navidades en una gran carpa de 700 metros cuadrados en la Plaza de las Constelaciones (PAU-4).
La edil ha defendido la inversión de 181.500 euros en este Belén, único en el mundo y exclusivo en España, por donde pasaron cerca de 100.000 personas de distintas ciudades y que ha ayudado también “a la dinamización del comercio y la hostelería local”.
Beneficio para el comercio y la hostelería
García ha explicado que, aunque todavía no tienen a su disposición el balance económico de los diferentes establecimientos, aunque da por descontado que ha tenido “una gran influencia en los beneficios económicos” de muchos de los comerciantes y hosteleros de la zona, que así se lo han trasladado al Consistorio.
“Los comerciantes y hosteleros del PAU-4 sí que nos han agradecido que hayamos pensado en su barrio, que muchas personas tanto de Móstoles como de fuera vayan al PAU y conozcan la oferta hostelera. Eso hará que vuelvan al barrio”, ha reiterado la edil de Economía, Industria y Empleo.
Además, la concejala ha hecho hincapié en que en la instalación, además del Belén gigante de Playmobil y otras exposiciones de estos famosos juguetes, se han ofrecido diversas actividades lúdicas para los niños, “supervisados por monitores y monitoras que allí trabajaban y que, por cierto, eran de Móstoles”.
Éxito de los bonos de Navidad
Por otro lado, García también ha defendido el funcionamiento de la campaña de Móstoles Desarrollo ‘Móstoles se viste de navidad’, que ha servido también para dinamizar el comercio y la hostelería local durante las fiestas navideñas.
Desde el PSOE habían calificado de “verdadero desastre” esta campaña de promoción económica, especialmente la línea 3, que emitía una serie de bonos descuentos que los vecinos podían descargarse y utilizar en los comercios adheridos en la campaña.
Aunque García ha reconocido que al principio hubo “algunas incidencias”, ha destacado que se han mejorado los procesos de gestión con respecto a otros años y se han incrementado los establecimientos participantes en la campaña, además de que los bonos “se han pagado en tiempo y forma”.