El proyecto para la construcción de cuatro nuevas residencias concertadas en otras tantas parcelas municipales de Móstoles seguirá adelante después de que el Pleno rechazara este jueves una propuesta de PP que pretendía «suspender» el proceso de concesión del suelo público para las mismas.
La propuesta fue rechazada gracias al voto de calidad de la alcaldesa, Noelia Posse (PSOE), ya que la votación arrojó un empate a 11, tras el apoyo de PP (6), Ciudadanos (3) y Vox (2), la abstención de Más Madrid (2) y Podemos (2), y el voto en contra de PSOE (10) y un concejal no adscrito.
Desde el PP insistían en «suspender de oficio» la licitación en estos momentos abierta «por razones de interés general», con el objetivo de modificar los pliegos «garantizando el control de los servicios afectados durante la vida de la concesión», así como «la actualización del canon anual» que pagarían por el uso de suelo.
El portavoz adjunto del PP, Alberto Rodríguez de Rivera, ya reprochó hace unas semanas al Ejecutivo local que se hubieran aprobado los cuatro pliegos de cláusulas administrativas para la concesiones demaniales de uso privativo de las cuatro parcelas sin incluir esa revisión anual del canon.
Rodríguez de Rivera ha recalcado que la no inclusión de una revisión anual del canon, «perjudicará económica y patrimonialmente al Ayuntamiento», mientras que el futuro concesionario «sí podrá modificar los precios del servicio y los alquileres» a lo largo de los 53 años que durará la concesión.
Desde la Concejalía de Presidencia y Desarrollo Urbano, responsables del proceso, siempre han defendido que han sido «los técnicos municipales» los que han establecido el criterio de cálculo del canon, y que este ha sido resultado «completamente objetivo» del trabajo técnico de las áreas del Ayuntamiento afectadas.
Aún así, la propuesta del PP planteaba la opción de «establecer un sistema de adecuación del canon de la concesión actualizando su importe en periodos de 10 años, aplicando entre el 3 y el 5% del valor catastral la parcela».
Sin embargo, la propuesta finalmente ha sido rechazada, por lo que el polémico proyecto, que ha provocado discrepancias en el seno del Gobierno de coalición tras la oposición de Podemos al modelo público-privado de construcción de las residencias, seguirá adelante tal y como estaba planificado desde un inicio.

Proyecto público-privado
Este modelo de colaboración público-privada prevé que el Consistorio aporte, en concesión demanial, el suelo para la construcción de cuatro complejos residenciales a cambio de un canon, mientras que las empresas interesadas se harían cargo de la construcción y gestión de la concesión, que será por 53 años.
Además, cada uno de los cuatro complejos asistenciales contaría con un edificio diseñado para residencia de personas mayores, un centro de día y «pequeños núcleos de convivencia intergeneracional en alquiler de VPPL (Vivienda de Protección Pública a Precio Limitado)» con diferentes características y tipologías.
Las parcelas previstas para la construcción de los cuatro centros incluidos en este primer plan municipal están ubicadas en la Calle Iker Casillas (junto a la Comisaría y frente al Parque Liana); la Calle Violeta (lindando la actuación con el Parque Lineal de los Planetas); la Plaza del Sol y la avenida de la Vía Láctea.
Todas estas parcelas, pertenecientes al Ayuntamiento, están «cerca de centros hospitalarios» y su edificación iba a suponer la creación de 500 empleos directos de manera inmediata y a corto plazo (muchos de ellos destinados a mujeres), así como la reactivación económica y social del municipio.