El colegio público Ana María Matute de Getafe se ha visto obligado a confinar 18 de las 28 aulas del centro a causa de un brote de contagios por covid-19, que se inició el 20 de octubre pasado y que afecta ya a 60 personas, la mayoría de ellos alumnos del centro.
Desde la Consejería de Sanidad han confirmado que el colegio ha sido intervenido por Salud Pública y que, al menos, hay 49 personas afectadas por el mismo, aunque fuentes sindicales y los padres del centro aseguran que son más, ya que “no se iniciaron las pruebas de cribado hasta el 5 de noviembre pasado“.
El sindicato CCOO ha criticado que, a pesar de las “continuas peticiones de actuaciones y de solicitud de medidas preventivas e incluso del cierre temporal del centro educativo”, la Comunidad de Madrid “hizo oídos sordos” y “no inició las pruebas de cribado hasta el pasado viernes”.
“Pero ahí no queda la cosa. Inexplicablemente dichas pruebas solo incluyeron al alumnado, dejando fuera al profesorado y demás trabajadores y trabajadoras del centro educativo”, añaden desde CCOO en un comunicado, donde acusan al Gobierno regional de “descoordinación y falta de diligencia”.
Según el sindicato, este retraso en el cribado de los alumnos “ha provocado que un pequeño brote que se podía haber atajado con una actuación rápida haya derivado en una extensión del contagio que ha obligado a confinar 18 de las 28 aulas del colegio“.
Padres indignados
Los padres también se han quejado del elevado tiempo en que se ha tardado en reaccionar, porque los cribados comenzaron a realizarse cuando ya había una decena de aulas confinadas.
Según ha señalado a Noticias para Municipios uno de los padres afectados, no fue hasta el pasado viernes y este lunes cuando el personal de Cruz Roja realizó cribados de antígenos en el gimnasio del colegio a todos los alumnos y también a profesores y personal.
“El viernes se realizaron cribados en los grupos de primaria que no estaban confinados. El resultado de los cribados dio positivos en cuatro de los siete grupos“, asegura este padre, que asegura que tienen datos de que hay “alrededor de 60 positivos desde el día 20 de octubre”.
Los padres añaden que el lunes se realizaron cribados en el colegio a más clases, el profesorado y el personal de comedor y cocina. Todos los casos de profesores y trabajadores han sido negativos. En relación con el cribado realizado a las clases de primero y segundo de primaria ha habido positivos y se han tenido que confinar dos grupos más.
Aún así, desde la Consejería de Sanidad insisten en que se han seguido “todos los protocolos de cribado a los escolares y a los profesores relacionados con el brote”, para lo cual se cuenta con un convenio con Cruz Roja “que incluye el desplazamiento de sus equipos para los cribados”.
Además, estas fuentes aseguran que “gran parte de las aulas en cuarentena han retornado ya a su actividad y el resto lo harán en breve”.
En cuanto al origen, según los padres, se baraja la posibilidad de que el brote se iniciase en un cumpleaños celebrado fuera del colegio al que acudieron alumnos de varias aulas.