El portavoz de Más Madrid Compromiso con Getafe, Jesús Pérez, ha remitido una carta a la Dirección del Hospital Universitario de la localidad para solicitar una reunión en la que abordar «las causas y posibles soluciones» a uno de los problema con el que se encuentran los pacientes en el servicio de Urgencias: la falta de material como almohadas en unas Urgencias que «están colapsadas».
Según ha trasladado la formación, numerosos vecinos han dado a conocer a Más Madrid Compromiso con Getafe que se han visto «obligados a permanecer en Urgencias durante largas horas sin que el personal sanitario les haya podido facilitar almohadas» porque a determinadas horas ya no hay disponibles, algo que puede acrecentar las patologías o dolencias de los pacientes.
Según relata Más Madrid Getafe, los sanitarios a veces las sustituyen por mantas, pero ante el colapso de las urgencias y el retraso en la atención, «las mantas también terminan faltando», traslada la organización.
Más Madrid Compromiso con Getafe insiste en que el problema se agrava las jornadas en las que, este lunes, «los pacientes son atendidos en los pasillos del hospital y había 45 personas pendientes de ingreso, con una estimación de hasta dos días para acceder a planta», según denunciaba el colectivo de trabajadores y trabajadoras de Urgencias del Hospital de Getafe.
En este sentido, el diputado de Más Madrid en la Asamblea de Madrid Javier Padilla ha manifestado que «no puede ser que mientras la Comunidad de Madrid tiene un hospital vacío sin pacientes, como es el Zendal, los pacientes de urgencias de un centro público no tengan unos mínimos de atención».

Materiales «básicos»
«Cuidar a la población -ha agregado- va desde las condiciones de trabajo de los profesionales y las infraestructuras de los centros hasta los materiales más básicos de higiene y comodidad para alguien que tiene que pasar un tiempo en una cama».
Por su parte, Pérez ha insistido en que «los pacientes no pueden salir de las urgencias peor de lo que entraron porque el Hospital de Getafe no tenga el número de almohadas suficientes para la población atendida o no pueda gestionar el proceso de lavandería».
«No estamos hablando de grandes inversiones -ha precisado-, estamos hablando de tratar con dignidad a la gente que acude con alguna dolencia al hospital y que se ven obligadas a permanecer largas horas en unas urgencias que están colapsadas».