Patones de Arriba, un pueblo situado en la frontera entre la Comunidad de Madrid y Guadalajara, esconde un tesoro poco conocido a solo 60 kilómetros al noreste de la capital española. Aislado del mundo y gobernado por un «rey» hereditario hasta el siglo XVIII, este pueblo mágico es un lugar donde el tiempo se ha detenido. Con sinuosas calles y casas rurales de pizarra, Patones de Arriba es un ejemplo perfecto de la «arquitectura negra» de la región.
En las últimas décadas, la mayoría de los residentes se han trasladado a Patones de Abajo, por lo que el antiguo pueblo ha sido renovado como un destino turístico con casas rurales, restaurantes, tiendas ecológicas, talleres de artesanía y otros comercios. Muchos de estos negocios son propiedad de urbanitas bohemios que han decidido abandonar la ciudad para siempre. Por eso, Patones de Arriba es considerado el pueblo más pintoresco de Madrid, y es una excelente opción para desconectar en un fin de semana.
Patones: El reino perdido
Aunque la existencia de Patones de Arriba solo está documentada desde el siglo XVI, es probable que su origen sea anterior y se remonte a la época de la invasión árabe de la Península Ibérica. Durante siglos, la aislada población se regía por un rey-alcalde hereditario, y la tradición oral sostiene que un libro escrito por los reyes y forrado en piel de gato, con la historia del pueblo, existió hasta la Guerra Civil, momento en que los documentos se quemaron junto con los archivos de Uceda. A pesar de ello, algunos ancianos del lugar aún hablan de esta historia.
¿Qué visitar en Patones de Arriba?
Patones es un paraíso para los amantes de la historia y la naturaleza. Este pueblo es rico en tesoros arqueológicos y paisajes impresionantes. Por ejemplo, puedes visitar el Yacimiento de la Dehesa de la Oliva, un sitio de gran valor histórico, o disfrutar de las vistas desde lo alto del cerro en el Cancho de la Cabeza. Además, Patones es conocido por su patrimonio hidráulico, con estructuras como la presa de El Atazar o la más antigua, la del Pontón de la Oliva, que se encuentra en la Comunidad de Madrid.
Al caminar por las calles empinadas y sinuosas, podrás apreciar de cerca las típicas viviendas construidas con materiales como la pizarra, la madera, el ladrillo árabe, las jaras y las retamas. No te pierdas la visita a la iglesia de San José, el lavadero y la Fuente Nueva, uno de los rincones más fotografiados de Patones de Arriba que te transportará a otra época. También puedes admirar los antiguos hornos de leña, un elemento característico de la arquitectura tradicional del pueblo y un reflejo de la importancia de la ganadería en la economía local.
En las afueras, encontrarás la ermita románico-mudéjar de la Virgen de la Oliva, del siglo XIII. Un poco más allá, la historia y el sendero te llevarán a los restos de un castro prerromano, antes de llegar a la presa del Pontón de la Oliva. También encontrarás la cueva del Posteguillo, que guarda pinturas rupestres y demuestra la fuerza del pasado bajo la montaña.
¿Dónde comer en Patones de Arriba?
Si quieres disfrutar de la gastronomía local, Patones de Arriba te ofrece una gran variedad de restaurantes donde degustar los platos típicos de la zona, como el cordero asado, el cocido madrileño, las migas o las patatas revolconas. Algunos de los restaurantes más recomendados son:
- El Lavadero de Patones, un restaurante de carne y cocina mediterránea, que destaca por su calidad, su servicio y su ambiente acogedor. Es ideal para familias con niños y tiene una terraza con vistas al pueblo.
- El Rey de Patones, un establecimiento que ofrece comida mediterránea y platos con presentación espectacular. Tiene una buena relación calidad-precio y un salón con chimenea que invita a relajarse.
- El Chiscon, un restaurante con decoración rústica y precios asequibles, que sirve comida tradicional y casera. Es un lugar con encanto y con una carta variada y apetitosa.
- El Rincón de Patones, un restaurante que fusiona la cocina tradicional con la moderna, creando platos originales y sabrosos. Tiene un ambiente agradable y un personal atento y profesional.
Estos son solo algunos ejemplos de los muchos restaurantes que puedes encontrar en Patones de Arriba, un pueblo que te sorprenderá por su gastronomía y su belleza.
¿Cómo llegar a Patones de Arriba?
Patones está ubicado en la Sierra Norte de Madrid, en el noreste de la región, a aproximadamente 60 km de la capital. Hay dos centros principales, Patones de Arriba (con acceso limitado para vehículos) y Patones de Abajo, que es un punto de partida perfecto para explorar el municipio.
Puedes llegar a Patones en automóvil tomando la salida 50 de la Autovía del Norte (A-I) y continuar hacia Torrelaguna por la N-320. Después de cruzar Torrelaguna, sigue hasta Patones de Abajo por la M-102, donde encontrarás amplios estacionamientos gratuitos disponibles.
¿Dónde aparcar en Patones de Arriba?
El acceso a Patones de Arriba solo está permitido para residentes y propietarios con autorización por parte del Ayuntamiento. La entrada es monitoreada por un sistema OCR y cualquier vehículo sin autorización será sancionado. Personas con discapacidad deben contactar con el Ayuntamiento antes de visitar.
Se recomienda estacionar en Patones de Abajo y subir caminando por la Senda del Barranco. Este camino de 800 metros no es apto para carritos de bebé ni sillas de ruedas.