Una joven de nacionalidad española fue detenida el pasado sábado en el interior de una discoteca del centro de Madrid por su presunta relación con la venta de pastillas de éxtasis, por las que cobraba 10 euros, según las pesquisas realizadas en el establecimiento. La mujer vendía, asimismo, otras sustancias estupefacientes.
Agentes de la Policía Municipal fueron los responsables del arresto. La joven fue localizada el pasado día 4 a las 3:30 horas en el interior de la discoteca Cocó, ubicada en el número 20 de la calle Alcalá.
Efectivos de la policía vestidos de paisano realizaban una inspección en el interior del local cuando detectaron la presencia de dos personas en la zona de los baños que estaban apalabrando la compra de droga. En concreto, pastillas de éxtasis por 10 euros.
Tras no detectarle nada sospechoso en el cacheo, al ser inquirido por los agentes, el supuesto vendedor identificó a una persona en la pista de baile como la portadora de la droga.
Así, los agentes localizaron a una joven española nacida en 1999 y que ocultaba en el interior de su pantalón 10 papelinas de MDMA, 29 pastillas de éxtasis y 160 euros en billetes fraccionados, por lo que procedieron a su arresto y a la incautación de este material.
Más detenciones relacionadas con las drogas
La detención realizada en la discoteca de la capital no es la única relacionada con el tráfico y venta de estupefacientes que se ha desarrollado en los últimos días en la Comunidad de Madrid. Tres individuos fueron detenidos por efectivos del Cuerpo Nacional de Policía de Leganés con una cantidad indeterminada de sustancias estupefacientes que podría alcanzar los 5.000 euros en la calle, así como 4.000 euros.
Una patrulla que realizaba funciones de seguridad ciudadana en la localidad fue la que se percató de la circulación a una velocidad «inusualmente alta» de un vehículo con tres ocupantes. En la intervención del vehículo se encontró el dinero, del que no pudieron los detenidos especificar el origen, así como la droga.
Los agentes apresaron a los tres ocupantes del vehículo como presuntos autores de un delito contra la salud pública. Posteriormente, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, quien decretó su inmediato ingreso en prisión.
