Los penaltis vuelven a apear al CD Leganés de la Copa del Rey
Como ya sucediera el año pasado ante el Racing, el CD Leganés cayó en la tanda de penaltis tras llegar con empate (1-1) al final de los 120 minutos contra el Numancia.
LEGANÉS / 11 SEPTIEMBRE 2014 / Ganas de Copa en Leganés, donde aún muchos recordaban la cruel forma en la que el equipo pepinero quedó apeado el año pasado. Un conjunto, aún sin rodaje y lejos de aquella plantilla triunfadora que acabó subiendo, generaba dudas, pero jugó un gran partido para empatar con el Racing en un choque que llegó a la prórroga. El colegiado no vio un claro penalti y en la tanda final los cántabros se llevaron el gato al agua.
Sin embargo, todo era nuevo en esta ocasión Butarque. En este caso, directamente un conjunto de Segunda División aunque de nuevo a partido único. Muchos cambios los introducidos por Asier Garitano en el once, como ya contábamos que iba a ser. Así, con respecto a los titulares que saltaron al terreno de juego ante el Mallorca únicamente repetían los dos jugadores que recorren el flanco diestro: Rubén Peña y Velasco.
En el banquillo, a excepción de Serantes, que estrenaba convocatoria tras su fichaje, y Fran Moreno, que ante los bermellones jugó la segunda mitad, todos los demás sí que fueron titulares en la victoria por 3-1 del domingo. Mordieron los jugadores desde el principio, conscientes de lo que se juegan en una plantilla larga cuando aún el técnico no considera como fijo a prácticamente ninguno.
Diamanka lo intentó desde el principio, llegando arriba y atrás. El ex del Rayo Vallecano es desparpajo, pero por el momento adolece de lo mismo que cuando jugaba en Vallecas: combina un pase inmaculado con un error de categoría inferior. Con todo eso, libraba una bonita batalla ante el talentoso Íñigo Pérez. Diego Aguirre, cedido por el Rayo precisamente, también buscaba desborde por una banda izquierda en la que hacía sufrir a su par, Kader. En una internada suya trató de asistir a Diamanka, que llegando desde atrás buscó recortar al zaguero soriano antes de embocar la meta, pero terminó cayendo al suelo.
Los blanquiazules llegaron más en una primera mitad en la que no hubo ocasiones claras, pero los de Asier Garitano dejaron un mejor regusto y su juego le sirvió para internarse en varias ocasiones en la meta de Munir, portero visitante, que en la única ocasión que tuvo que intervenir estuvo atento para tapar un pase desde atrás en el que Carlos Álvarez ya preparaba la caña.
En la segunda mitad, como ya sucediera en la primera, los blanquiazules amasaban más la pelota ante un Numancia con sello Anquela, buscar conectar con su delantero, Braian Rodríguez, que trataba de peinar y aguantar balones en busca de las internadas de sus rivales. Carlos Álvarez se movía entre los defensas rivales, pero a los pepineros les costaba conectar esa jugada que les sirviera para adelantarse.
Sin embargo, el que lo hizo fue el Numancia en un remate de Braian Rodríguez al palo izquierdo de Dani Barrio. El exjugador del Betis recibió un centro de Gerrit que remató con maestría. Las consecuencias no se hicieron esperar porque Asier Garitano introdujo a Eraso y Álvaro García en busca de revolucionar un encuentro al que le faltaba chispa.
Y lo consiguieron ante un Numancia atrincherado. Carlos Álvarez, como en todas las grandes citas, volvió a aparecer tras sensacional pase de Eraso para colocar con una vaselina el tanto del empate después de un doble fallo de la zaga rojilla. Primero la defensa no despejó, y posteriormente el portero permitió ese remate con su media salida. El partido se marchaba a la prórroga.
Pocas ideas y mucho cansancio en una primera parte extra donde si uno lo intentó fue el Leganés ante un Numancia carente de ideas pero que esperaba su oportunidad. En la segunda esto se acentuó, pero no llegaban las ocasiones claras que dieran paso al gol. Los sorianos firmaban ir a los penaltis frente a un Leganés que le faltaba conectar el último pase. Ambos equipos tomaron el camino hacia la tanda de penaltis. Carlos Sánchez, entrenador de porteros, hablaba con Dani Barrio, cancerbero pepinero, antes de tomar camino hacia la portería. Sin embargo el que se encumbró como protagonista fue Munir, portero visitante, que detuvo los lanzamientos de Eraso y Aguirre, dando el pase a su equipo.
Corresponsal / Aitor Fernandez