El gerente de la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS), José Manuel Miranda de las Heras, ha insistido este lunes en que se está detectando «una disminución de las quejas» por la cantidad de comida en los menús de las residencias públicas de la región desde la implantación del nuevo contrato para la prestación de este servicio.
Así lo ha defendido durante su intervención en la Comisión de Familia y Política Social de la Asamblea de Madrid, donde ha comparecido en la última sesión de la legislatura a petición de la diputada de Más Madrid Tania Sánchez.
Miranda de las Heras ha subrayado que el análisis de la calidad de los menús que hace el organismo que dirige es «positivo» y ha recalcado que las quejas «han disminuido significativamente» hasta el punto de que las que se comunican son «similares» a las que se registraban con el anterior sistema.
Así, ha destacado que la media es de una incidencia registrado por centro cada 60 días, lo que ha puesto en valor si se tiene en cuenta que el sistema gestiona 58 centros y 9.600 comensales.
El gerente de AMAS ha señalado, asimismo, que desde el inicio del nuevo contrato se han realizado 222 controles en la recepción de los productos y 22 a los almacenes, con unos resultados que han «mejorado a lo largo meses».

Residencia ‘Francisco de Vitoria’
José Manuel Miranda de las Heras se ha referido, en concreto, a la residencia ‘Francisco de Vitoria’ de Alcalá de Henares, la cual ha sido objeto de numerosas críticas por la calidad de sus menús.
Sobre este punto, ha subrayado que la inspección realizada el pasado 6 de marzo «por la autoridad competente» –aspecto que ha enfatizado frente a la inspección municipal celebrada el pasado 28 de febrero y en la que se detectaron niveles altos de legionela en el agua de la ducha–, se comprobaron que todos los menús servidos se adecuaban a las dietas señaladas para los usuarios, con cantidades adecuadas y condiciones correctas de temperatura y organolépticas.
También ha defendido el gerente de AMAS que las opiniones recogidas entre los usuarios de este centro divergían entre «algunos descontentos» y otros «plenamente contentos».
Por todo ello, ha insistido en que las incidencias «van bajando» y ha insistido en que cuando se detecta que la calidad del producto no es buena, «se retira y se repone la mercancía» sin que exista «riesgo para la salud de los comensales».
Sin embargo, la diputada Tania Sánchez ha recordado las «muchísimas quejas» que se han producido en cuanto a la «calidad y cantidad de la comida» que se sirve en estos centros y ha cuestionado también el modelo de adjudicación de los lotes del contrato, algo a lo que Miranda de las Heras ha respondido que se han seguido «todas las seguridades» en el mismo.