Leticia Sánchez Secretaria General de Podemos Parla habla sobre el proceso que vive Podemos actualmente en la Comunidad de Madrid
PARLA/ 21 SEPTIEMBRE 2016 / Echo la vista atrás y me parece mentira que hayan pasado algo más de dos años desde que empezamos a construir esta herramienta que llamamos Podemos. Hemos vivido tanto y con tanta intensidad en tan poco tiempo…
Recuerdo el día en el que quedamos en mi barrio unas cuantas personas y pegamos carteles de la campaña para las elecciones europeas. Recuerdo las primeras Asambleas del Círculo. Algunas nos reconocíamos de las plazas, del 15M o de otros espacios. Otras no nos conocíamos de nada. Y ahí estábamos todas: mayores y jóvenes, con y sin militancia previa, parados y con empleo, estudiantes… Por fin había una alternativa en la que sentirse cómodo, que no te preguntaba de dónde venías, dispuesta no a ocupar la casilla fija de contestataria oficial, sino con posibilidades efectivas de intervención en la vida cotidiana de la gente.
Desde entonces, hemos vivido en carne propia que no hay organizaciones políticas sin trabajo de construcción orgánica, y éstos nunca son fáciles. Las tareas de trasformación no son siempre épicas, hay toda una serie de tareas grises. Pero teniendo presente que por encima de eso, están los “para qué”. Los modelos organizativos no se desligan de los objetivos políticos. Y el “para qué” es una mayoría popular nueva en nuestro país. El “cómo” es pasar de la maquinaria de guerra electoral a un movimiento popular, más descentralizado, con más capacidad de integrar las diferencias y con más raíz en el territorio.
Porque somos mucho más que liderazgos mediáticos. El Podemos que no sale en los medios es el Podemos que se ha armado con mucho esfuerzo de personas que quieren no sólo cambiar sus vidas, sino la de sus vecinos y vecinas. Gracias a esas personas y a su trabajo de hormiguitas, hemos conseguido ser primera fuerza en Parla en cada una de las contiendas electorales a las que nos hemos enfrentado. Con dificultades, pero con el convencimiento de que asentar los logros en los municipios es lo más importante para asentar la herramienta y hacerla útil para la vida de la gente.
Ahora es tiempo de mirar hacia adelante. Se abre un nuevo ciclo político, un nuevo tiempo en el que podemos levantar la vista, mirarnos y debatir para construir juntos y juntas el Podemos que queremos en Madrid. Quienes hemos estado trabajando en el terreno ahora conocemos cuáles son las necesidades de la organización y los territorios, podemos analizar los posibles errores cometidos y aprender de ellos, estar orgullosas de lo que hemos conseguido y seguir caminando.
En la tarde de ayer, compañeros y compañeras del Consejo Ciudadano Municipal y los Círculos de Parla debatimos sobre cómo podría ser un Podemos mejor para la Comunidad de Madrid en el marco de la iniciativa Proceso Adelante. Esta iniciativa puede caracterizarse por los ejes que propone para empezar a pensar (con nosotras, con el municipalismo, con los imprescindibles, por los que faltan y por el pueblo de Madrid) pero también por irrumpir, desbordar e ilusionar sin pedir permiso. Por la voluntad de construir un Podemos útil para la mayoría social, a la altura de sus necesidades, sus anhelos y sus ilusiones. Era una necesidad recurrente la de generar espacios no sólo de escucha, sino de participación y sobre todo decisión en todo el territorio de la Comunidad de Madrid. Y en eso estamos: seguiremos dando forma a la iniciativa juntas y juntos, con la gente.
Podemos ha sido la herramienta democrática de cambio más potente de la que ha dispuesto nuestro país en las últimas décadas. Es hora de que seamos capaces de aprovechar esta oportunidad para que lo siga siendo. Adaptarnos a la nueva etapa repitiendo el gesto original de Podemos: pateando el tablero, evitando situarnos donde nos quiere el adversario y poniendo por delante de todo las necesidades de la gente más allá de a quién hayan votado en el pasado o cuál sea su trayectoria militante.
Tenemos que seguir siendo capaces de poner en el centro las necesidades y los problemas de la mayoría social para ser una herramienta útil para los de abajo y que ponga nerviosos a los de arriba. No olvidemos el 15-M y sus lecciones principales.
“Lo importante es que la llave abra la cerradura, no la naturaleza de la llave”