Vox ha interpuesto una querella ante el juzgado de Primera Instancia de Parla contra el alcalde de la localidad, el socialista Ramón Jurado, por presuntos delitos de prevaricación y coacciones tras expulsar al portavoz de la formación, Juan Marcos Manrique, del Pleno del pasado 9 de octubre.
El conflicto se originó cuando, aquel día, el concejal solicitó una cuestión al orden para que se retiraran pancartas y carteles sobre Palestina exhibidos por concejales de PSOE, Más Madrid y Podemos en sus asientos, así como por parte del público asistente.
La querella relata que el alcalde se negó a cumplir con el reglamento del Pleno argumentando que la exhibición de pancartas o carteles se ha visto en otros Parlamentos autonómicos o nacionales. Más tarde, tras una nueva intervención de Manrique, este recibió insultos desde el público.

Los insultos
En concreto, le habrían proferido insultos como «hijo de puta» y «mierda fascista», entre otros. La formación ha confirmado que también se ha denunciado a esta persona del público por un posible delito de odio ante el Juzgado de Instrucción número 4 de Parla.
Al pedir de nuevo la intervención del alcalde, éste le llamó al orden por segunda vez y le ordenó que abandonara el Pleno. La querella se basa en estos hechos, apuntando que es necesario llamar al orden tres veces a un concejal antes de expulsarle de la sesión.

Vox considera que la expulsión de Manrique es ilegal. De hecho, presentan un informe del Secretario General del Pleno, a 5 de noviembre y que avanzó Noticias para Municipios, en el que a su entender se corrobora que la expulsión no se ajusta a lo dispuesto en la normativa municipal que rige el Pleno.
Uso de la policía local
Por otro lado, la querella acusa al alcalde de cometer un delito de coacciones al obligar al concejal de Vox a abandonar la sesión bajo amenaza de hacer uso de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
Finalmente, Manrique abandonó voluntariamente el Pleno después de que agentes de la Policía Local le informaran de que debía hacerlo después de que Jurado así lo ordenara.

Vox considera que la conducta de Jurado es constitutiva de delitos de prevaricación por no hacer cumplir el reglamento y por la expulsión ilegal; y un delito de coacciones.
La querella solicita la declaración del alcalde, la remisión de la grabación del Pleno y la declaración como testigos de varios agentes de la Policía Local intervinientes en el incidente.
«El alcalde me expulsó del pleno de forma irregular, vulnerando mis derechos y utilizando su cargo para silenciarme», ha denunciado Manrique, quien alerta de una «campaña de manipulación» en su contra por parte de la izquierda, que ha solicitado su reprobación.
Un segundo informe justificativo
Por su lado, fuentes municipales han recordado que existe un segundo informe del Secretario General donde se «avala la expulsión y la actitud reprobada del concejal de Vox».

En ese documento, que también avanzó Noticias para Municipios, se justifica la expulsión del edil por motivos de seguridad, a raíz del tenso ambiente que había en la sesión plenaria entre el edil y el público asistente con las pancartas. «Esto responde por si solo a esa querella», han asegurado las mismas fuentes.
