Getafe aspira a convertirse en el oasis de la zona Sur de Madrid. Su proyecto es alcanzar en los próximos años los 100.000 árboles, para lo que ha ideado un ambicioso plan de arbolado que incluye actuaciones en el interior de los colegios: la idea es ir apartando poco a poco el frío hormigón en los patios para dar paso a nuevos espacios renaturalizados donde predomine el color verde.
La ciudad dispone en estos momento de un 40 por ciento de cobertura vegetal: es la extensión que abarcan los más de 62.581 árboles adultos censados en la localidad, cifra que incluye los entornos urbanos y el resto de espacios, entre ellos el Cerro de los Ángeles y los bosques periféricos, así como aquellos árboles jóvenes que se han plantado los últimos años.
En 2023, por ejemplo, se plantaron centenares de ejemplares arbóreos al mes y el objetivo este año es plantar otros 2.000, así como 9.000 arbustos y flores. Pero este ambicioso proyecto no se queda solo en los espacios urbanos: quiere llegar también a los colegios.
De esta manera, en una primera fase se prevén plantar hasta 120 árboles en el interior de quince colegios públicos. Es una manera de combatir las olas de calor (mediante la sombra que proporcionan), pero también supone un cambio de tendencia.
De esta manera, se intentará dar un nuevo concepto a los patios donde estudian los pequeños, dejando de lado el frío hormigón de las pistas deportivas de los espacios comunes. “Ya el balón no es el protagonista central de los patios. Hoy hay otro concepto, porque el eje central ya no es la pista de deportes”. Son palabras de Sacramento Santos, consejera de Mantenimiento de Parques y Jardines de Getafe.
“Ya el balón no es el protagonista central de los patios. Hoy hay otro concepto, porque el eje central ya no es la pista de deportes”
De momento, el departamento estudia la manera de renaturalizar los patios de unos 17 colegios, a instancias de la Dirección de cada centro.
Uno de los primeros centros en aplicar la nueva idea de sustituir el “hormigón por zonas arboladas” ha sido el ‘Jorge Guillen’, donde se diseñó una zona con distintos niveles y área de tierra, donde los niños puedan disfrutar de “espacios verdes”. Fue algo “absolutamente distinto”, esgrime.
Para ello, Parques y Jardines, junto a los técnicos de Mantenimiento, visitan los centros donde se va a actuar para ver qué se puede hacer.
A veces las buenas intenciones para un diseño se topan con la dura realidad: acometidas inexistentes, muros que suponen un obstáculo… Por eso, se lleva a cabo un trabajo conjunto. Se analiza el espacio, dónde están las acometidas de agua y todo lo necesario para crear un nuevo ambiente.
Además de las evidentes ventajas de tener árboles dentro de los colegios, los niños suelen crear un vínculo con los ejemplares arbóreos durante su crecimiento, un elemento importante también en este proyecto, que arroja sus mejores resultados en un “futuro a medio plazo”.
En cuanto a las especies de árboles que se plantarán, hay numerosos factores determinantes: el espacio que hay, que sean ejemplares que no favorezcan las alergias de la población, que tengan buenas copas…
El entorno de los centros
Desde 2023 se estudia la ampliación del arbolado en los centros educativos, un proyecto al que, poco a poco, se van sumando los colegios. Muchos ya trabajaban con las ‘Ecoescuelas’ y eso ha sentado cierto precedente.
Pero el proyecto no abarca solo el interior de los colegios, sino los entornos de los centros. Se trata de llevar el culto por los árboles más allá de los espacios físicos.
“Se trata de ver dónde hay espacios y hacer nuevas plantaciones. Donde hay hueco, allá que vamos”, asegura la responsable técnica.
El bulevar que hay frente al colegio ‘Miguel de Cervantes’, por ejemplo, en Los Molinos es un ejemplo de este tipo de actuaciones, puesto que allí se prevé una “línea de árboles”.
“Es un proceso laborioso”, esgrime Sacramento, mientras recuerda que el pasado año llegó a plantar hasta 400 árboles al mes en su política medioambiental.
