La Plaza del Sol de Móstoles ha acogido este lunes, bajo una mañana fría, gris y lluviosa, un emotivo homenaje a Irina y su hija Mariya, las dos vecinas de la ciudad que fueron asesinadas el pasado 6 de noviembre a manos de su marido y padre, respectivamente, siendo las dos últimas víctimas de la violencia de género en la ciudad.
A petición de los compañeros de crossfit de Irina, se ha procedido a la plantación de dos árboles que quedarán para siempre en su recuerdo. El momento más emotivo ha sido cuando las compañeras y amigas de la pequeña Mariya han depositado dibujos de hojas de árboles en el lugar en el que han sido colocadas sus raíces.
La alcaldesa, Noelia Posse, acompañada de amigas y amigos de Irina y de la pequeña Mariya, el presidente del Senado, Ander Gil, el rector de la Universidad Rey Juan Carlos, Javier Ramos, y otras autoridades y vecinos, ha descubierto además una placa en su memoria.
La placa reza la siguiente inscripción: “El 6 de noviembre de 2022 el corazón de la ciudad de Móstoles se rompió en 1.000 pedazos. Irina y su pequeña Mariya fueron asesinadas víctimas de violencia de género. Su recuerdo, su luz y su voz quedarán en este lugar para no olvidarlas jamás”.
“Hoy sigue siendo un día triste para Móstoles pero estén donde estén Irina y Mariya, estarán orgullosas, porque en este lugar, frente al sitio donde Irina conoció a tanta gente que la quiere y donde fue feliz y se llenaba de energía practicando el deporte que tanto le gustaba, quedará grabado su nombre y el de su pequeña, junto a dos árboles, que representan la vida y la luz que se apagó el pasado 6 de noviembre”, ha añadido la alcaldesa.
La Primera Edil ha lamentado también tantos minutos de silencio por tantas mujeres asesinadas. “No queremos secundar más minutos de silencio en memoria de las víctimas de la violencia machista. No queremos más homenajes a mujeres asesinadas. Queremos homenajes y actos para mujeres vivas, valientes, fuertes y trabajadoras, porque no nacimos mujeres para morir por serlo”, ha afirmado.
Por su parte, el presidente del Senado, Ander Gil, ha lamentado las 38 mujeres asesinadas por violencia machista este año en nuestro país. “Es un auténtico drama social, un problema de seguridad pública ante el que no podemos callar y mirar a otro lado. Se llama violencia de género, existe y asesina a las mujeres en este país”, ha expresado.
Conmoción en El Soto
El suceso ocurrió la noche del domingo 6 de noviembre en la Avenida Olímpica en Móstoles. La voz de alarma la dieron los vecinos sobre las 22.00 horas con una llamada a la central del 112 tras haberse presentado algún amigo o conocido de la familia en la vivienda tras ser avisado por el propio agresor a través de Whatsapp.
Cuando llegaron al lugar los equipos de Summa-112, encontraron a la mujer y a la menor fallecidas por arma blanca, que podrían llevar varias horas muertas, mientras que el hombre presentaba heridas en tórax, muslos y cuello también por arma blanca.
El presunto homicida, de 39 años, fue trasladado esa noche al Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda, donde ha estado en vigilancia policial permanente, recuperándose de las heridas que se autoinfligió después de presuntamente matar a su mujer y su hija.
La magistrada titular del Juzgado de Violencia Sobre la Mujer de Móstoles ha acordado la prisión provisional comunicada y sin fianza para el presunto autor de los hechos, que está investigado por la supuesta comisión de dos homicidios, si bien esta calificación penal es inicial y podría variar según se vayan practicando las correspondientes diligencias de investigación en el marco de la instrucción judicial, según han señalado fuentes judiciales.