Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón que estafó 335.000 euros mediante engaños amorosos por Internet a otra persona, víctima que transfirió el dinero a varias cuentas bancarias después de ser engañada por un supuesto artista de Corea del Sur, que le prometió “una idílica relación y un maravilloso proyecto de futuro”.
Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los hechos se remontan a octubre de 2020, cuando la víctima, una mujer afincada en la localidad de Leganés, adquirió una entrada online para un concierto de un conocido cantante surcoreano.
Supuestamente, este hecho fue agradecido por el mismo artista en persona, momento en que se inició una relación de afectividad a través de redes sociales que se prolongó hasta marzo de este año, si bien ambos nunca llegaron a conocerse físicamente.
Durante este periodo, expone la Jefatura, el falso artista con la excusa de la sucesión de diversos acontecimientos y vivencias personales, que forman parte de “una laboriosa
trama urdida con el fin de embaucar y convencer a la víctima”, le solicitó importantes cantidades de dinero, con la promesa de devolvérselo.
La víctima leganense llegó a realizar transferencias a varias cuentas bancarias de entidades españolas y extranjeras por valor de 335.000 euros, que aportó de
su patrimonio y el de sus padres, así como con la solicitud de préstamos.
Investigaciones
Las investigaciones realizadas por la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaría de Leganés llevaron a identificar la titularidad de varias cuentas en las que se realizaban los ingresos, logrando detener a un varón en la localidad de Parla como presunto autor de un delito de estafa.
Los agentes prosiguen con las pesquisas para el total esclarecimiento de los hechos y no se descartan nuevas detenciones.
La Policía ha alertado de la proliferación de estas estafas y ha pedido a los consumidores que estén atentos. Los estafadores de romances crean perfiles falsos en sitios y aplicaciones de citas, o se comunican con sus posibles víctimas a través de medios sociales populares como Instagram, Facebook o Google Hangouts. En ocasiones suplantan identidades de personas conocidas y entablan una relación con sus blancos para ganarse su confianza. Con el paso del tiempo, acaban pidiendo cantidades importantes de dinero.
