La mortalidad se situó en un 10,8%, según una carta del gerente a la plantilla
LEGANÉS / 29 MAYO 2020 / El hospital Universitario Severo Ochoa de Leganés atendió en los dos meses críticos de la pandemia del Covid-19, desde mediados de marzo hasta la mitad de mayo, a 3.562 pacientes afectados por la epidemia, según una carta del gerente del centro, Domingo del Cacho, a la plantilla a la que ha tenido acceso Noticias para Municipios.
De ese número, 1.826 fueron ingresados en el propio centro, 525 fueron derivados a “diversas clínicas privadas y hospitales de apoyo y, de ellos, 348 al pabellón” del hsopital temporal del Ifema.
En la misiva, Del Cacho justifica la gestión realizada durante la crisis sanitaria en el hospital leganense, que ha conseguido “resolver sus efectos con unos indicadores situados en rango y similares al resto de hospitales”. “La estancia media de pacientes hospitalizados ha sido de 9 días, 23 en la UCI. La mortalidad -finaliza- de los pacientes atendidos se ha situado en el 10,8%”.
En este sentido, el director asegura que ante la “masiva afluencia de pacientes” al servicio de Urgencias durante el pico de la epidemia, se amplió el número de camas hasta “alcanzar la cifra de 488 ocupadas”, al tiempo que se triplicó la capacidad de la UCI de adultos, que “pasó de 10 camas a 32 ocuapdas”.
Mientras, la plantilla del hospital se reforzó con 209 efectivos de todas las categorías. El servicio de limpieza se reforzó con 12 puestos, la seguridad con un puesto y la Farmacia con un puesto de guardia más.
El gerente, que reconoce que el coronavirus ha castigado de “manera implacable a Leganés”, justifica en la carta las medidas emprendidas para tratar de “resolver el duro golpe de la pandemia”.
Urgencias “desbordadas”
Así, recuerda el “horrible momento” de las Urgencias desbordadas, atendiendo al triple de pacientes en unas “imágenes que dieron la vuelta al mundo”.

En este punto, rememora cómo en esos momentos tuvieron la “imperiosa necesidad de dar asistencia a todos los pacientes”. “Buscamos para ellos todas las camas existentes disponibles -relata- pero también sillas y sillones. Somos muy conscientes de que esta circunstancia no queremos que se repita, comprendemos perfectamente que esta situación no puede volver a suceder”.
En este punto, y tras admitir que como gerente no quiere ofrecer esa asistencia, precisa que “en ese momento, y ante la situación de extraordinaria excepcionalidad que se estaba produciendo en Leganés, no tuvimos otra alternativas”.
“Debíamos dar atención sanitaria a quienes acudían a nuestra Urgencia”, esgrime, tras reconocer que la respuesta de todo el personal fue la “titanes”, con “esfuerzo, vocación, coraje e increíble profesionalidad”.
Del Cacho advierte que, ante un posible rebrote de la epidemia, “no vamos a permitir que una segunda oleada nos pille con paso cambiado”, motivo por el que han solicitado la colaboración de la ONG Médicos del Mundo, con acreditado conocimiento en pandemias.