El testimonio de Robert Wolffberg, uno de los niños supervivientes del Holocausto, ha protagonizado este jueves el acto de homenaje a las víctimas de la barbarie nazi que ha organizado el Ayuntamiento de Alcorcón para «rendir homenaje a los seis millones perseguidos, humillados y discriminados y asesinados por el régimen nazi y sus colaboradores».
Wolfberg, que más de 80 años después sigue narrando su historia para dar voz a todos aquellos niños judíos perseguidos y asesinados por el nazismo, ha estado presente en el Teatro Buero Vallejo para recordar a los más de 6 millones de personas que murieron asesinadas en los campos de exterminio y las víctimas que sobrevivieron.
En un conmovedor testimonio, este superviviente de la barbarie nazi ha narrado en primera persona como a sus padres les obligaron a realizar trabajos forzados, mientras que sus abuelos fueron enviados a campos de concentración.
Tras la Segunda Guerra Mundial, su familia quedó reducida de algo más de 70 personas a tres, según ha detallado, por ello ha pedido «nunca olvidar» para que la historia no se vuelva a repetir.
El acto, que ha contado con la colaboración de los alumnos y alumnas de diversos centros educativos de Alcorcón, así como el IES Rafael Fruhbeck de Burgos, ha girado en torno al encendido de 6 velas.
Cada vela simboliza la memoria de las víctimas: el millón y medio de niños judíos asesinados por los nazis; los miembros de las minorías que padecieron la barbarie nazi: gitanos, personas con discapacidad, homosexuales, Testigos de Jehová, republicanos españoles y otros colectivos; toda forma de resistencia y en honor a los Justos entre las Naciones y aquellos quienes, a riesgo de sus vidas, salvaron a miles de perseguidos; los supervivientes que hicieron sus vidas en Israel y en la diáspora; y la preservación de la memoria de las víctimas del Holocausto y de los Justos entre las Naciones por la ineludible responsabilidad de luchar contra el negacionismo, rechazar el odio, combatir la indiferencia y elevar los principios de la convivencia y la vida.
Turno de los jóvenes
«Estos actos de memoria histórica son imprescindibles y la juventud tiene que estar presente en ellos, en primera fila, para conocer qué es lo que pasó y para evitar que la historia se repita» ha señalado la alcaldesa, Natalia de Andrés, quien ha recalcado que «la memoria histórica es ya una seña de identidad de esta ciudad»
La regidora socialista ha insistido en la necesidad de «fomentar el respeto, la cooperación y la tolerancia, para que caminemos juntos y para recordar a las víctimas y sus testimonios de superación y de resiliencia».
«Su experiencia sigue viva para seguir cimentando nuestro compromiso a favor de la tolerancia«, ha añadido, reiterando que Alcorcón «está plenamente implicada en esta necesidad de reivindicar la memoria histórica porque es garantía de libertad y de respeto a las libertades, de avance social y de superación de los errores cometidos».
Este acto, organizado por el Ayuntamiento de Alcorcón, Comunidad Judía de Madrid (CJM) y Centro Sefarad – Israel (CSI), ha contado con la asistencia de diversos miembros de la Corporación Municipal, el rector de la URJC, miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.