Los efectivos de la Unidad Especial de Emergencia y Respuesta Inmediata (Ericam) de la Comunidad de Madrid se han desplegado ya la zona de Iskenderum, cercana a la ciudad de Alejandreta en Turquía, y han comenzado a trabajar para ayudar al país tras el terremoto que este lunes asoló la frontera de Turquía y Siria.
El equipo de la región se suma así a unas labores donde son trascendentales las primeras 72 horas. Y es que el balance de víctimas mortales ha ascendido a más de 7.200, mientras que la cifra de heridos ronda ya los 35.000, según los últimos balances oficiales, que incluyen más de 5.500 fallecidos en territorio turco.
Después del viaje, los 40 efectivos del Ericam que se han desplazado al país han descargado el material y se han puesto en contacto con las autoridades locales que coordinan todo el despliegue, ha informado el Gobierno regional.
Estarán coordinados por el Mecanismo Europeo de Protección Civil. En concreto, en el Ericam se han desplazado 30 efectivos de Bomberos de la Comunidad, cinco profesionales del Summa 112 y cuatro perros, cuatro guías caninos y un veterinario de la unidad canina de Protección Civil de Las Rozas y también de la Escuela Española de Salvamento y detección con perros.

Los efectivos tienen previsto trabajar también de noche, y establecerán turnos para poder relevarse y que siempre haya alguien trabajando, ha informado.
En la tarde de ayer, el dispositivo madrileño realizó un segundo vuelo a bordo del mismo avión del Ejército del Aire en el que llegó, en este caso desde el aeropuerto turco en el que aterrizó hacia una base de la OTAN más próxima a la que será su zona de trabajo, tal como les han asignado las autoridades de aquel país.
Esto facilitará que a los miembros del Ericam trabajar sobre el terreno, ya que los aeropuertos civiles turcos presentan «muchas complicaciones» por el «gran colapso» que ha sufrido el país dada la afluencia de contingentes de ayuda internacionales y las dificultades de las autoridades locales para organizar estos servicios.